jueves, 26 de agosto de 2021

"Memorias de mi cuerpo", de ANA MARÍA MAYOL (ARGENTINA)


Desnúdate la piel sobre mis sabanas
hazme luz
horizonte en este vuelo

cobíjame en los ojos
en los cerrados párpados
mientras tu aliento sopla
dentro de mi boca

y la noche se trepa
por los sentidos

Busca lento el camino
tatuado en mi deseo

halla el sitio preciso
que abre todas las puertas
con el grito acallado por el aullido
de una loba en la noche

juega
a estremecer el aire
sobre mi espalda
con tus manos de mago

recoge la sal entre mis nalgas

graba el olor
sobre el perfume nuestro
para hallar el regreso

mientras descifro
el código del éxtasis

muerdo tu sabor

hallo las claves

para que no se olvide mi cuerpo
de nombrarte






Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






lunes, 23 de agosto de 2021

"Soneto: Mil veces digo, entre los brazos puesto", de FRANCISCO DE ALDANA (ESPAÑA, 1537-1578 d.n.e.)


   Mil veces digo, entre los brazos puesto

de Galatea, que es más que el sol de hermosa.

Luego ella, en dulce vista desdeñosa,

me dice: «Tirsis mío, no digas esto»


   Yo lo quiero jurar y ella, de presto,


tosa encendida de un color de rosa,

con un beso me impide y, presurosa,

busca atrapar mi boca con su gesto.


   Hágole blanda fuerza por soltarme

y ella me aprieta más y dice luego:


«No lo jures, mi bien, que yo te creo».

 

   Con esto, de tal fuerza a encadenarme

viene que Amor, presente al dulce juego,

hace suplir con obras mi deseo.



Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






viernes, 20 de agosto de 2021

"Promesa" de MEIRA DELMAR (seudónimo de OLGA ISABEL CHAMPS EIJACH, COLOMBIA, 1922-2009 d.n.e.)


En alguna mañana azul y florecida
iremos dulcemente, con las manos unidas

a escuchar las historias que el arroyo murmura
ante el fácil asombro de las piedras desnudas...

No diremos, amado, una sola palabra:
hablarán nuestros ojos su lenguaje de magia,

y la brisa curiosa llegará muy callada
sin romper el embrujo de la hora encantada…

Después... como un racimo de hermosas uvas nueva
–tronchadas de la vid por manos tempraneras–

yo dejaré en tu boca con un poco de miedo,
el sabor ignorado de mis besos primeros...






Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






lunes, 16 de agosto de 2021

"Capricho 2", de ALFONSINA STORNI (Argentina, 1.892-1.938)


Escrútame los ojos, sorpréndeme la boca,
sujeta entre tus manos esta cabeza loca;
dame a beber veneno, el malvado veneno
que moja los labios a pesar de ser bueno.

Pero no me preguntes, no me preguntes nada
de por qué lloré tanto en la noche pasada;
las mujeres lloramos sin saber, porque sí.
Es esto de los llantos pasaje baladí.

Bien se ve que tenemos adentro un mar oculto,
un mar un poco torpe, ligeramente oculto,
que se asoma a los ojos con bastante frecuencia
y hasta lo manejamos con una dúctil ciencia.

No preguntes amado, lo debes sospechar:
en la noche pasada no estaba quieto el mar.
Nada más. Tempestades que las trae y las lleva
un viento que nos marca cada vez costa nueva.

Sí, vanas mariposas sobre jardín de Enero,
nuestro interior es todo sin equilibrio y huero.
Luz de cristalería, fruto de carnaval
decorado en escamas de serpientes del mal.

Así somos, ¿no es cierto? Ya lo dijo el poeta:
deseamos y gustamos la miel en cada copa
y en el cerebro habemos un poquito de estopa.

Bien. No, no me preguntes. Torpeza de mujer,
capricho, amado mío, capricho debe ser.
Oh, déjame que ría. ¿No ves que tarde hermosa?
Espínate las manos y córtame una rosa.







Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






domingo, 15 de agosto de 2021

Soneto "Las copas", de ALBERTO ÁNGEL MONTOYA (COLOMBIA, 1902-1970 d.n.e.)

Para buscar el alma de los vinos
no me basta mi cáliz cincelado.
quiero altas copas de cristal tallado
que imiten largos cuerpos femeninos.

Copas en cuyos bordes cristalinos
el vino fuera un beso prolongado,
ya que en todas las bocas que he besado
los besos fueron capitosos vinos.

Unas en cuya euritmia transparente,
nuestros ávidos ojos evocaran
giros de amor en cuerpos de serpiente.

Otras castas cual núbiles doncellas,
y tan frágiles, ay, que se quebraran
en nuestras manos al beber en ellas.





Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






sábado, 14 de agosto de 2021

Soneto "Del amor de cada día", de RAMÓN DE GARCÍASOL (ESPAÑA, 1913-1994 d.n.e.)

Es posible que se haya dicho todo
y que hayamos nacido tal vez tarde.
Mas esta gloria que en mis venas arde,
nadie -¡nadie!- la vive de este modo.

Todo es posible. Todo ha sido en nombre:
todo. Pero este beso tuyo y mío,
esta luz, esta flor, este rocío,
son nuestros nada más, mujer y hombre.

Mujer y hombre únicos, primeros,
-tú y yo, yo y tú- con nombres y apellidos
que no se han de dar más en criatura.

Empezamos la Historia, verdaderos
primer hombre y mujer reconocidos,
proclamando el amor y su aventura.





Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






miércoles, 11 de agosto de 2021

“Boca de llanto”, de JAIME SABINES GUTIÉRREZ (Méjico, 1925-1999 d.n.e.).

Poema perteneciente al libro "La señal", de fecha 1951  d.n.e.



Boca del llanto, me llaman
tus pupilas negras,
me reclaman, tus labios
sin ti me besan
.
¡Cómo has podido tener
la misma mirada negra
con esos ojos
que ahora llevas!

Sonreíste. ¡Qué silencio,
qué falta de fiesta!
¡cómo me puse a buscarte
en tu sonrisa, cabeza
de tierra,
labios de tristeza!

No lloras, no llorarías
aunque quisieras;
tienes el rostro apagado
de las ciegas.

Puedes reír. Yo te dejo
reír, aunque no puedas.




Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






martes, 10 de agosto de 2021

"Amor oscuro", de MANUEL ALTOLAGUIRRE BOLÍN (ESPAÑA, 1.905-1.959 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "Las islas invitadas", de fecha 1936  d.n.e.



Si para ti fui sombra
cuando cubrí tu cuerpo,
si cuando te besaba
mis ojos eran ciegos,
sigamos siendo noche,
como la noche inmensos,
con nuestro amor oscuro,
sin límites, eterno…
Porque a la luz del día
nuestro amor es pequeño.






Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






lunes, 9 de agosto de 2021

"Poema cuarto", de YOLANDA EUNICE ODIO INFANTE (COSTA RICA, 1919-1974 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "Los elementos terrestres", de fecha 1947  d.n.e.




Poema cuarto
(Canción del Esposo a su Amada)


Asomada a mi pecho
tatuada en él como la edad
y el daño.

Como una suave grey de colinas
cuyo rumbo retorna con el alba,

habla mi amada
con su amor que tiene
apenas pecho diurno y voz descalza.

A mi sombra
se bordearon de pulpa su caderas.

Por mí arrea con sus pechos
el ganado del alba,

y la tarde a su paso se quebranta,
como de junco herido
y laurel entornado.

Párpados transitados
de nieve y mediodía,

Pozo donde mi boca
desmedida resbala
como torrente de paloma
y sal humedecida.

Sobre los muslos te pusieron
racimos de ira y vocación de besos.

Yo haré que de tus muslos
bajen manojos de agua,
y entrecortada espuma,
y rebaños secretos.

Ven,
Amada.

Los árboles
todos tienen tu cándida estatura,
y tu párpado caído,
y tu gesto mojado,

edificio de alondras
habitado de climas
donde legisla el sol
sobre viñedos de oro.

A tu sombra
me encontrarán los pájaros salvajes.

Tu voz de aire caído
entre cuatro azucenas,
desfilará en mi oído
como acude la tarde.

Ven,
te probaré con alegría,
tú soñaras conmigo
esta noche.

Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






sábado, 7 de agosto de 2021

"Ahí, donde la piel se funde", de GABRIELA GUZMÁN


Voy a tu cuerpo,
agazapada,
cautelosa
de la mirada del miedo;
verdugo que asesina
a golpes de soledad.

Fugitiva,
arribo a tu blanda estación
recorriendo a besos lentos
el refugio donde desvalijo caricias

que me enmohecían las manos.

Hoy libre,
para esconder mis rincones
en tu calor y humedad
y burlar al polvo:
memoria de tiempos áridos.

Ya no soy más
espacio de dolor
cuando en ti
me desbordo mar.




Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






jueves, 5 de agosto de 2021

"Hasta morirla", de OCTAVIO JOSÉ OLIVERIO GIRONDO (ARGENTINA, 1891-1967 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "En la masmédula ", de fecha 1953  d.n.e.



Lo palpable lo mórbido
el conco fondo ardido los tanturbios
las tensas sondas hondas los reflujos las ondas de la carne
y sus pistilos núbiles contráctiles
y sus anexos nidos
los languiformes férvidos subsobornos innúmeros del tacto
su mosto azul desnudo
cada veta
cada vena del sueño del eco de la sangre
las somnilocuas noches del alto croar celeste que nos animabisman el soliloquio vértigo
cuanto adhiere sin costas al fluir el pulso al rojo cosmogozo
y sus vaciados rostros
y sus cauces
hasta morder la tierra
lo ignoto noto combo el ver del ser lo ososo los impactos del pasmo de más cuerda
cualquier estar en llaga
los dones dados donde se internieblan las órbitas los sorbos de la euforia
cualquier velar velado con atento esqueleto que se piensa
la estéril lela estela
el microazar del germen del móvil del encuentro
los entonces ya prófugos
la busca en sí gratuita
los mititos
hasta ingerir la tierra
todo modo poroso
el pozo lato solo del foso inmerso adentro
la sed de sed sectaria los finitos abrazos
toda boca
lo tanto

el amor terco a todo
el amormor pleamante en colmo brote totem de amor de amor
la lacra
amor gorgóneo médium olavecabracobra deliquio erecto entero
que ulululululula y arpeialibaraña el ego soplo centro
hasta exhalar la tierra
con sus astroides trinos sus especies y multillamas lenguas y excrecreencias
sus buzos lazo lares de complejos incestos entre huesos corrientes sin desagües
sus convecinos muertos de memoria
su luz de mies desnuda
sus axilas de siesta
y su giro hondo lodo no menos menos que otros afines cogirantes
hasta el destete enteco
hasta el destente neutro
hasta morirla




Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






martes, 3 de agosto de 2021

"Buscando tu saliva", de ANTONIO GAMERO (EL SALVADOR, 1917-1974 d.n.e.)


En esta constelación de gritos
y en este vaivén de olas humanas y difusas,
yo busco la corriente clara de tu saliva
—ungüento iluminado de palabras y risas—.
Me quito la camisa, el miedo y los zapatos
y subo por escalas de aire y nada
para asaltar y desflorar
la desnuda verdad de la esperanza.
Bombardeo la noche
con mis vacilaciones de luciérnagas
y mis manos llegan submarinas
a sabotear el rojo resplandor de tus piernas.

Yo busco inopinadamente tu saliva
para que no se riegue inútilmente
en este gran vacío donde todo se pierde
y para humedecer la tierra
donde la yerba y la golondrina
bajo la sed se hermanan en la muerte.

Yo busco tu saliva mentolada
para pegar cabezas
desprendidas del cuerpo de los niños
y para alimentar las células
de la gente leprosa que anda buscando asilo.
Para abrirles los ojos a los gatos naciendo
bajo trenos de sol desgobernado
y para desapegar las estampillas
de cartas censuradas que me vienen
de los confusos y lejanos puertos.

Yo sé que todos los amantes vinieron
a besar la rosada cicatriz de tus labios
y a extraer el zumo de tus limas maduras:

al herirte la carne y al enardecer tus brazos.
Mas yo he venido sólo para buscar tu saliva;
tu saliva que sirve sólo para limpiar metales,
tu saliva que apaga el cansancio de mis miembros,
tu saliva que ahoga la cólera de las viejas,
tu saliva que lava la camisa de Dios,
tu saliva que ablanda las conciencias,
tu saliva que abre hoyos en las piedras,
tu saliva que es frágil en la hora de abrazarnos,
tu saliva que es sangre perfumada, incolora,
tu saliva que es germen de santos y profetas,
tu saliva que es sal y agua bendita
para animar la ira del demonio.

Todos los amantes vinieron a buscar tu carne;
en cambio yo agonizo buscando tu saliva
para inyectar este animal enfermo
que traigo aprisionado en mi camisa.







Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado:
 






domingo, 1 de agosto de 2021

"TENGO TUS LABIOS", de JOSÉ LUIS CANO GARCÍA DE LA TORRE (España, 1912-1999, d.n.e.)

Quizá perdí mi juventud, quizá
perdí Lloridas increíbles.
Quizá perdí otras cosas, pero tengo
la sal ardiente de tus labios.

Una infancia perdí, quizá un deseo
de una luz entre pinos y el mar puro.
Perdí el cielo del sur, pero ahora tengo
la sal y el fuego de tus labios.

Perdí aquel mar, y aquel afán eterno
de en él perderme y olvidarme.
Perdí más: a mi madre, pero tengo
la rosa oscura de tus labios.

Perdí hace tiempo aquel ocio andaluz,
puro y tranquilo como el aire.
Perdí la paz, pero ahora tengo
la gracia honda de tus labios.

De aquella primavera, de aquel ocio
sólo el recuerdo y el perfume quedan.
Estoy solo y herido, y sólo tengo
una luz que besar: la de tus labios.

Sí, perdí mi bahía, donde el tiempo
no parecía existir sino soñando.
Unos sueños perdí, pero te tengo
y contigo a tus labios.

¿Perdí a Dios? Una noche sentí oscura
la soledad, la muerte entre los brazos.
Y helado el corazón. Mas luego tuve
la honda caricia de tus labios.

Ya no estaré más solo. Quiera el mundo
herir con frío o con puñal mi alma,
ya no estaré más solo porque tengo
la compañía de tus labios.





Leer más poemas de este autor en el blog BESOS.

Enlace recomendado: