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miércoles, 5 de julio de 2023

"Y no quieras a la diosa", de GLORIA FUERTES, seudónimo de GLORIA JORGE GARCÍA (ESPAÑA, 1917-1998 d.n.e.)

Y no quieras a la diosa
sin saber si ella te deja.
Y no esperes a su boca
sin saber si ella te espera
.
Y no digas que la quieres,
si tan solo la deseas,
que esa mujer pone un verso
en cada beso que deja.




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martes, 29 de noviembre de 2022

"Palabras para una mirada", de FRANCISCO BRINES BAÑÓ (ESPAÑA, 1932-2021. d.n.e.)



Miras, con ojos luminosos,
mientras hablo, mis ojos. Los cabellos
son fuego y seda,
y el rosa laberinto del oído
desvaría en la noche,
acepta las razones que doy sobre una vida
que ha perdido la dicha y su mejor edad.
¿Cómo me ven tus ojos? Yo sé, porque estás cerca,
que mis labios sonríen,
y hay en mí delirante juventud.
Inocente me miras, y no quiero saber
si soy el más dichoso hipócrita.
Sería pervertirte decir
que quien ha envejecido es traidor,
pues ha dado la vida
o dado el alma,
no sólo por placer, también por tedio,
o por tranquilidad;
muy pocas veces por amor.
He acercado mis labios a los tuyos,
en su fuego he dejado mi calor,

y emboscado en la noche
iba espiando en ti vejez y desengaño.




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viernes, 18 de noviembre de 2022

"Comience el sendero a serpentear", de JOSÉ AGUSTÍN GOYTISOLO GAY (ESPAÑA, 1928-1999 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "El retorno", de fecha 1954  d.n.e.



Digo: comience el sendero a serpear
delante de la casa. Vuelva el día
vivido a transportarme
lejano entre los chopos.
Allí te esperaré.
Me anunciará tu paso el breve salto
de un pájaro en ese instante fresco y huidizo
que determina el vuelo
y la hierba otra vez como una orilla
cederá poco a poco a tu presencia.
Te volveré a mirar a sonreír
desde el borde del agua.
Sé lo que me dirás. Conozco el soplo
de tus labios mojados:
tardabas en llegar. Y luego un beso
repetido en el río.

De nuevo en pie siguiendo tu figura
regresaré a la casa lentamente
cuando todo suceda.




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viernes, 23 de septiembre de 2022

"Ahí mismo", de CLAUDIO RODRÍGUEZ (ESPAÑA, 1934-1999 d.n.e.)


Te he conocido por la luz de ahora,
tan silenciosa y limpia,
al entrar en tu cuerpo, en su secreto,
en la caverna que es altar y arcilla,
y erosión.
Me modela la niebla redentora, el humo ciego
ahí, donde nada oscurece.
Qué trasparencia ahí dentro,
luz de abril,
en este cáliz que es cal y granito,
mármol, sílice yagua. Ahí, en el sexo,
donde la arena niña, tan desnuda,
donde las grietas, donde los estratos,
el relieve calcáreo,
los labios crudos, tan arrasadores
como el cierzo, que antes era brisa,
ahí, en el pulso seco, en la celda del sueño,
en la hoja trémula
iluminada y traspasada a fondo
por la pureza de la amanecida.
Donde se besa a oscuras,
a ciegas, como besan los niños,
bajo la honda ternura de esta bóveda,
de esta caverna abierta al resplandor
donde te doy mi vida.

Ahí mismo: en la oscura
inocencia.




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martes, 6 de septiembre de 2022

"Provocación ilusoria de un accidente mortal", de FRANCISCO BRINES BAÑÓ (ESPAÑA, 1932-2021, d.n.e.)

He aquí el ciego, que sólo ve la vida en el recuerdo.
Era la playa estrecha e irregular, junto al mar sosegado en el crepúsculo;
y el mundo va a morir, porque en la soledad y en la belleza
tendrá lugar el acto del amor dentro del agua.
Desnudos reposamos en la orilla
del sur del Adriático platino,
y aguardamos la noche en nuestros ojos.
Mas no vino la noche; sí el infortunio
(la vida sucedida desde entonces).
Y aquella brisa falsa, ya en el coche,
mientras los faros amarillos desunían la intimidad de la fatiga y aquel país extraño.
Ahora acerco tu rostro hasta mi boca,
y quiero que mi vida y tu historia concluyan bruscamente.

Y si existe el poema, no fue escrito por nadie.




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viernes, 19 de agosto de 2022

"Gestos", de CLAUDIO RODRÍGUEZ (ESPAÑA, 1934-1999 d.n.e.)


Una mirada, un gesto,
cambiarán nuestra raza. Cuando actúa mi mano,
tan sin entendimiento y sin gobierno,
pero con errabunda resonancia,
y sondea, buscando
calor y compañía en este espacio
en donde tantas otras
han vibrado, ¿qué quiere
decir? Cuántos y cuántos gestos como
un sueño mañanero,
pasaron. Como esa
casera mueca de las figurillas
de la baraja: aunque
dejando herida o beso, sólo azar entrañable.

Más luminoso aún que la palabra,
nuestro ademán, como ella
roído por el tiempo, viejo como la orilla
del río, ¿qué
significa?
¿Por qué desplaza el mismo aire el gesto
de la entrega o del robo,
el que cierra una puerta o el que la abre,
el que da luz o apaga?
¿Por qué es el mismo el giro del brazo cuando siembra
que cuando siega,
el de amor que el de asesinato?

Nosotros, tan gesteros pero tan poco alegres,
raza que sólo supo
tejer banderas, raza de desfiles,
de fantasías y de dinastías,
hagamos otras señas.
No he de leer en cada palma, en cada
movimiento, como antes. No puedo ahora frenar
la rotación inmensa del abrazo
para medir su órbita
y recorrer su emocionada curva.

No, no son tiempos
de mirar con nostalgia
esa estela infinita del paso de los hombres.
Hay mucho que olvidar
y más aún que esperar. Tan silencioso
como el vuelo del búho, un gesto claro,
de sencillo bautizo,
dirá, en un aire nuevo,
su nueva significación, su nuevo
uso. Yo solo, si es posible,
pido, cuando me llegue la hora mala,
la hora de echar de menos tantos gestos queridos,
tener fuerza, encontrarlos
como quien halla un fósil
(acaso una quijada aún con el beso trémulo)
de una raza extinguida.
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jueves, 8 de julio de 2021

"Adiós", de CLAUDIO RODRÍGUEZ (ESPAÑA, 1934-1999 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "Alianza y condena", de fecha 1965  d.n.e.




Cualquier cosa valiera por mi vida
esta tarde. Cualquier cosa pequeña
si alguna hay. Martirio me es el ruido
sereno, sin escrúpulos, sin vuelta,
de tu zapato bajo. ¿Qué victorias
busca el que ama? ¿Por qué son tan derechas
estas calles? Ni miro atrás ni puedo
perderte ya de vista. Esta es la tierra
del escarmiento: hasta los amigos
dan mala información. Mi boca besa
lo que muere, y lo acepta. Y la piel misma
del labio es la del viento
. Adiós. Es útil,
norma este suceso, dicen. Queda
tú con las cosas nuestras, tú, que puedes,
que yo me iré donde la noche quiera.







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jueves, 11 de febrero de 2021

"Beso pequeño", de FÉLIX GRANDE LARA (ESPAÑA, 1937-2014 d.n.e.)


Pequeño, como esa gota
de lluvia por la ventana
que nos moja la memoria
con levadura de brasa;

pequeño como esa hebra
de tiempo llamda cana
que lleva el oro del mundo
en su cicatriz de plata;

pequeño como ese ruido
que casi no lleva agua
y que les desadormece
a los montes sus guitaras;

pequeño, como una de esas
pequeñísimas palabras
que con una sola sílaba
llenan de luz una cara;

pequeño como el primer
hilo de sol, que le arranca
al corazón de la noche
la pasión de la mañana;

pequeño, como un candil
con una pequeña llama
que agranda por las paredes
una presencia fantástica;

pequeño, como el tamaño
en que se oculta una lágrima
cuya fuerza clandestina
puede arrasar una casa;

pequeño como esa arruga
que hace el pliegue de la sábana
donde se puede leer
un gran silencio que canta;

así de pequeño fue.
y así de pequeño basta.
¿Sabes?: los seres, por esto
se desviven y se matan.

Yo tengo un beso pequeño
y secreto, que acompaña
mis asuntos desdichados
y mis horas solitarias.






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lunes, 8 de febrero de 2021

"Suceso", de GLORIA FUERTES, seudónimo de GLORIA JORGE GARCÍA (ESPAÑA, 1917-1998 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "Obras incompletas", de fecha 1984  d.n.e.




Quiero que llegue, pero no deseo
acercarme a tu voz y no quemarme.
Echo a correr, sucede que me acerco,
huyo y me coso, río y me enveneno.
Canto y tu nombre se mezcla al estribillo,
bebo y me sabe todo a llanto tuyo.
Beso y me sabe a nada: no es tu boca.
Me distraigo y acuno con engaños.
Voy por las calles, tu tranvía me grita,
quiero dejarlo y se pega a mis dedos,
cierro la luz y vas y te apareces.
Digo pasó, y te encuentro en la puerta.




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viernes, 5 de febrero de 2021

"Tiempo mezquino", de CLAUDIO RODRÍGUEZ GARCÍA (ESPAÑA, 1934-1999 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "Desde mis poemas", de fecha 1983  d.n.e.



"Pulp Girl", de David Seguin



Hoy con el viento del Norte
me ha venido aquella historia.
Mal andaban por entonces
mis pies y peor mi boca
en aquella ciudad de hosco
censo, de miseria y de honra.
Entre la vieja costumbre
de rapiña y de lisonja,
de pobre encuesta y de saldo
barato, iba ya muy coja
mi juventud. ¿Por qué lo hice?
Me avergüenzo de mi boca
no por aquellas palabras
sino por aquella boca
que besó.
¿Qué tiempo hace
de ello? ¿Quién me lo reprocha?
Un sabor a almendra amarga
queda, un sabor a carcoma;
sabor a traición
, a cuerpo
vendido, a caricia pocha.

Ojalá el tiempo tan sólo
fuera lo que se ama. Se odia
y es tiempo también. Y es canto.
Te odié entonces y hoy me importa
recordarte, verte enfrente
sin que nadie nos socorra
y amarte otra vez, y odiarte
de nuevo. Te beso ahora
y te traiciono ahora sobre
tu cuerpo.
¿Quién no negocia
con lo poco que posee?
Si ayer fue venta, hoy es compra;
mañana, arrepentimiento.
No es la sola hora la aurora.




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miércoles, 20 de enero de 2021

"Un suceso", de CLAUDIO RODRÍGUEZ GARCÍA (ESPAÑA, 1934-1999 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "Desde mis poemas", de fecha 1983  d.n.e.



"Retrato de una joven" (1869), de Pierre Auguste Cot


Tal vez, valiendo lo que vale un día,
sea mejor que el de hoy acabe pronto.
La novedad de este suceso, de esta
muchacha, casi niña pero de ojos
bien sazonados ya y de carne a punto
de miel, de andar menudo, con su moño
castaño claro, su tobillo hendido
tan armoniosamente, con su airoso
pecho que me deslumbra más que nada
la lengua... Y no hay remedio, y le hablo ronco
como la gaviota, a flor de labio
(de mi boca gastada),
y me emociono
disimulando ciencia e inocencia
como quien no distingue un abalorio
de un diamante, y le hablo de detalles
de mi vida, y la voz se me va, y me oigo
y me persigo, muy desconfiado
de mi estudiada habilidad, y pongo
cuidado en el aliento, en la mirada
y en las manos, y casi me perdono
al sentir tan preciosa libertad
cerca de mí. Bien sé que esto no es sólo
tentación. Cómo renuncio a mi deseo
ahora. Me lastimo y me sonrojo
junto a esta muchacha a la que hoy amo,
a la que hoy pierdo, a la que muy pronto
voy a besar muy castamente sin que
sepa que en ese beso va un sollozo.



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lunes, 14 de diciembre de 2020

"La noche le es propicia", de JOSÉ AGUSTÍN GOYTISOLO GAY (ESPAÑA, 1928-1999 d.n.e.)

Venus dormida, de Luca Giordano



Todo fue muy sencillo:
ocurrió que las manos
que ella amaba,
tomaron por sorpresa
su piel y sus cabellos;
que la lengua
descubrió su deleite.

¡Ah! detener el tiempo!
Aunque la historia
tan sólo ha comenzado
y sepa que la noche
le es propicia,
teme que con el alba
continúe su sed
igual que siempre.
Ahora el amor la invade
una vez más. ¡Oh tú
que estás bebiendo!
Apiádate de ella,
su garganta está seca,
ni hablar puede.
Pero escucha su herido,
respira la agonía
de un éxtasis y el ruego:
¡no te vayas, no, no te vayas.
¡Quiero beber yo!




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martes, 1 de septiembre de 2020

"Carnal fuego amoroso", de JOSÉ MANUEL CABALLERO BONALD (ESPAÑA, 1926--, d.n.e.)

"Ángel oscuro", de Douglas Hofmann


Amor, primera forma de vivir, escucha:
¿eres tú la tristeza que enciende mi destino,
o acaso sólo existes desde un ser que sonríe
mientras tiemblan sus ojos esperando en los míos remansarse?

Yo no sé si te tuve, ¡oh amor! , dulce manera de luchar,
no sé siquiera si alguna vez
tus vigentes, iniciadas, estremecidas manos
tejieron en mi piel su táctil alegría.

Un día -lo recuerdo lo mismo
que si ahora en mi pecho me llegara el instante-,
creyó mi corazón que tú lo restañabas,
que tú te debatías dentro ya de mi cuerpo,
doblándome la carne, derrotándola en dichas,
contra la humana tierra de un país hermosísimo.
Pero escúchame, amor, carnal fuego armonioso,
escúchame no quieto, no tendido a mis plantas,
sino allí donde reinas, donde en vuelo dominas,
¿eras tú quien entonces refulgía en mi boca
desde otro ser que, amante, me centraba en el gozo?

Oh, no, no, tú no puedes oírme, tú no puedes hablarme,
porque aquello que el hombre más quisiera saber
responde siempre mudo dentro de su belleza.
Pero yo sí respiro los aires que tú sorbes;
sé que eres un pájaro que entre nubes desciende
hasta el lumbror premioso de los trinos,
o tal vez esta rosa familiar, llameante,
que derrama en sus pétalos tanta gloria de savias.
Estás allí, lo sé, bajo la tarde núbil,
bajo la noche y la mañana que por ti, brilladoras, renacen,
en los vientos que marchan y regresan un día
trayendo el mismo aroma virginal de las cumbres.
Y aquí, sobre esta humana vocación de ser piedra,
también es tu presencia la que late,
también es tu ternura, tu flagrante dominio,
el que enflora de vida los pechos que te ignoran.
Tú eres la luz de un paraíso donde el dolor se acuña
al gozo de unos cuerpos que, ávidos, se estrechan,
que, temblando, se aman bajo copiosos árboles
en cuya fronda un trino se extasía,
sobre la hierba ,dulce abatida por un peso de dioses.

Oh amor, carnal fuego armonioso, escucha:
escúchame la voz que por ti besa,

remózame las manos que acarician teniéndote ceñido,
abrígate en mi pecho donde tú palpitando me sostienes,
dame siempre tu forma, amor, tu celeste materia iluminada,
esa embriaguez con la que un cuerpo dentro de otro agoniza
por hundir en lo eterno la identidad humana.



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lunes, 17 de agosto de 2020

"Espera", de JOSÉ MANUEL CABALLERO BONALD (ESPAÑA, 1926--, d.n.e.)

Desnudo, de Anne-Christine Roda


Y tú me dices
que tienes los pechos vencidos de esperarme,
que te duelen los ojos de tenerlos vacíos de mi cuerpo,
que has perdido hasta el tacto de tus manos
de palpar esta ausencia por el aire,
que olvidas el tamaño caliente de mi boca.

Y tú me lo dices que sabes
que me hice sangre en las palabras de repetir tu nombre,
de golpear mis labios con la sed de tenerte,

de darle a mi memoria, registrándola a ciegas,
una nueva manera de rescatarte en besos
desde la ausencia en la que tú me gritas
que me estás esperando.

Y tú me lo dices que estás tan hecha
a este deshabitado ocio de mi carne
que apenas sí tu sombra se delata,
que apenas sí eres cierta
en esta oscuridad que la distancia pone
entre tu cuerpo y el mío.




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jueves, 23 de julio de 2020

"Suplantaciones", de JOSÉ MANUEL CABALLERO BONALD (ESPAÑA, 1926--, d.n.e.)

"Conjugación de mi última máscara", de Merlina Mendoza.jpg


Unas palabras son inútiles y otras
acabarán por serlo mientras
elijo para amarte más metódicamente
aquellas zonas de tu cuerpo aisladas
por algún obstinado depósito
de abulia, los recodos
quizá donde mejor se expande
ese rastro de tedio
que circula de pronto por tu vientre,

y allí pongo mi boca y hasta
la intempestiva cama acuden
las sombras venideras, se interponen
entre nosotros, dejan
un barrunto de fiebre y como un vaho
de exudación de sueño
y otras cavernas vespertinas,

y ya en lo ambiguo de la noche escucho
la predicción de la memoria:
dentro de ti me aferro
igual que recordándote, subsisto
como la espuma al borde de la espuma
mientras se activa entre los cuerpos
la carcoma voraz de estar a solas.




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sábado, 11 de julio de 2020

"Vivir o naufragar", de ÁNGEL CRESPO PÉREZ DE MADRID (ESPAÑA, 1996-1925 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "En medio del camino", de fecha 1971  d.n.e.



Déjame que me acerque a ti
a mojarme en tu piel,
en el olor
de tu voz, pues ya quiero
vivir o naufragar de muerte tuya.

Déjame

decir para que no
me entiendas las palabras,
igual que el mar no sabe
de vientos.

Déjame

dejarme junto a ti:
que yo me ahogue
en la luz de tus hombros,
haga pies
por donde tu cintura.

Déjame

beberme el mar,
amar el mar,
al abra de tus ojos.

Déjame

dejarme estar, bien hondo,
allá donde solemos,
donde no
se oye la brisa siempre.

Es cuando veo
caer un arco iris, levantarse
un pozo de tus manos.
O, como suele ser,
cierras el mundo
y sólo hay mar.

Un río

somos los dos, andamos
para que yo me hunda
en tus innumerables
olas,
pasamos juntos
por el solo paisaje
que se nos vive.

Déjame

cortar todos los árboles.






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viernes, 10 de julio de 2020

"Sé tú mi límite", de JOSÉ ÁNGEL VALENTE DOCASAR (ESPAÑA, 1929-2000 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "La memoria y los signos", de fecha 1966  d.n.e.



Tu cuerpo puede
llenar mi vida,
como puede tu risa
volar el muro opaco
de la tristeza.

Una sola palabra tuya quiebra
la ciega soledad en mil pedazos.

Si tú acercas tu boca inagotable
hasta la mía, bebo
sin cesar la raíz de mi propia existencia.

Pero tú ignoras cuánto
la cercanía de tu cuerpo
me hace vivir o cuánto
su distancia me aleja de mí mismo,
me reduce a la sombra.

Tú estás, ligera y encendida,
como una antorcha ardiente
en la mitad del mundo.

No te alejes jamás:

Los hondos movimientos

de tu naturaleza son
mi sola ley.

Retenme.

Sé tú mi límite.
Y yo la imagen
de mí feliz, que tú me has dado.







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jueves, 14 de febrero de 2019

"El amor", de GLORIA FUERTES GARCÍA, seudónimo de GLORIA JORGE GARCÍA (ESPAÑA, 1917-1998 d.n.e.)

El amor todo lo soporta.
El amor siempre va con el perdón a cuestas,
con el corazón en la mano,
con la verdad en la boca,
con el beso en los ojos,
con la ternura en el llanto.
El amor tiene vocación de santo,
pero no pasa de mártir.





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miércoles, 31 de mayo de 2017

"Mientras tú duermes", de CLAUDIO RODRÍGUEZ (ESPAÑA, 1934-1999 d.n.e.)

Poema perteneciente al libro "El vuelo de la celebración", de fecha 1979  d.n.e.




Cuando tú duermes
pones los pies muy juntos,
alta la cara y ladeada, y cruzas
y alzas las rodillas, no astutas todavía;
la mano silenciosa en la mejilla izquierda
y la mano derecha en el hombre que es puerta
y oración no maldita.

Qué cuerpo tan querido,
junto al dolor lascivo de su sueño,
con su inocencia y su libertad,
como recién llovido.

Ahora que estás durmiendo
y la mañana de la almohada,
el oleaje de las sábanas,
me dan camino a la contemplación,
no al sueño, pon, pon tus dedos
en los labios,
y el pulgar en la sien,
como ahora. Y déjame que ande
lo que estoy viendo y amo: tu manera
de dormir, casi niña,
y tu respiración tan limpia que es suspiro
y llega casi al beso.

Te estoy acompañando. Despiértate. Es de día.


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