Me empeñé en desprenderle la mantilla,
y ella, viendo en mi afán un loco exceso,
-"No -me decía- no! ¿Qué sabes de eso?"
Risueño el labio, roja la mejilla.
La fui quitando horquilla tras horquilla
y dándole por cada horquilla un beso.
Cayó el encaje por su propio peso,
y yo doblé a sus plantas la rodilla.
-"Alza -me dijo-, estar así no es bello".
La obra empezada concluir te toca.
-"¡Tengo la última horquilla en el cabello!"
Me erguí, se la arranqué con ansia loca,
se esparcieron sus rizos por su cuello,
ardió mi sangre... y la besé en la boca...
y ella, viendo en mi afán un loco exceso,
-"No -me decía- no! ¿Qué sabes de eso?"
Risueño el labio, roja la mejilla.
La fui quitando horquilla tras horquilla
y dándole por cada horquilla un beso.
Cayó el encaje por su propio peso,
y yo doblé a sus plantas la rodilla.
-"Alza -me dijo-, estar así no es bello".
La obra empezada concluir te toca.
-"¡Tengo la última horquilla en el cabello!"
Me erguí, se la arranqué con ansia loca,
se esparcieron sus rizos por su cuello,
ardió mi sangre... y la besé en la boca...
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